Rosario estaba siendo tratado en la Unidad de Quemados del Hospital Ney Arias Lora en Santo Domingo, donde inicialmente se había reportado cierta mejoría. Este progreso fue considerado por familiares y amigos como un “Milagro de Dios”.
Otros afectados fueron ingresados en la Unidad de Quemados del Hospital Arturo Grullón, en Santiago. Trágicamente, el jueves anterior, Adriel Leonardo y Ángel Santos, de seis y trece años respectivamente, fallecieron en este centro de salud debido a quemaduras de tercer grado que abarcaban entre el 50% y el 75% de su superficie corporal.
En respuesta a este suceso, autoridades llevaron a cabo allanamientos en varios establecimientos comerciales el viernes, en conjunto con fiscales de la provincia y agentes de la Policía. El objetivo de estos operativos fue desmantelar negocios dedicados a la venta de fuegos artificiales.
Estas acciones se llevaron a cabo después de que el domingo pasado varias personas resultaran heridas por la detonación de explosivos durante el cierre del carnaval de Salcedo, que culminó con la muerte de dos menores. En relación con este caso, la Policía ha detenido a varias personas, incluido Elvis Santos, padre de uno de los menores fallecidos.”
